Oh,
escuche su rostro y mis sueños.

Y yo desesperado ocultándome,
del tiempo.

Tu hermosa piel,
fue mi conadena.

Y tu sonrisa,
fue mi maldición.

Cadenas mentales, presiones reales, tu indiferencia harida.

Cegado bebeso, silsiones,
arreloja, ahogado en la mentira.

De,
ser el dueño de mi vida.

Sentirte cierto,
siento esta verdad.

Consumiste todo mi tiempo.

Un duendo fue mi vida.

Como se escapa de un recuerdo.

Como se borra vida.

Me quitaste lo puedo.

Fíjate allá tu desprecio.

Tuve que pagar el precio.

Y ahora nunca vivo aquí.

En medio del desierto.

Estoy cansado de este camino.

De vallar,
de mis rogas lágrimas.

Eras mi rayo de sol,
que rode el amio.

Solo apago la poca luz,
que había en mi interior.

Ni toda la arena,
ni sangre en mis venas me libraron del frío.

Mataste mis sueños.

Robaste mis años.

Fui un falso y vivo.

Pero llegó y así lo quemo.

No hace sentirte cierto.

Lo siento,
es la verdad.

Consumiste todo mi tiempo.

Un duendo fue mi vida.

Como se escapa de un recuerdo.

Como se borra vida.

Me quitaste lo puedo.

Fíjate allá tu desprecio.

Tuve que pagar el precio.

Y ahora nunca vivo aquí.

En medio del desierto.

Me quitaste lo puedo.