tomaba, le batalló,
cruzó la frontera,
en un mundo nuevo,
sin barreras,
y de aliacuestas,
su suerte giraba,
con tres cervezas al mismo tiempo se tomaba.
Si hay pera,
hay pera, pera, pera, así decía Chucky, si apretirme en su lema,
de las apuestas vive con tres chéves en la mano,
el gringo emigrante el sueño americano amano,
casi papá pero nunca lo sería,
a su novia la pastilla le daba día tras día,
el día que coronó, su amigo cumplía,
no fue a la,
fiesta el negocio lo detenía,
un amor en el salón le gustaba,
pero con su amigo ella,
andaba el carnal nunca le aclaró,
el Chucky solo observó.
Si hay pera,
hay pera, pera, pera, así decía el Chucky,
siempre firme en su lema,
de las apuestas vive con tres chéves en la mano,
el gringo emigrante el sueño americano amano,
una mantendrita ni en secreto,
su novia los mensajes encontró y todo valió,
cada fin de semana la botella levantaba,
la policía lo agarró y su peria voló.
La próxima vez que lo detuvieron le preguntó al poesí,
recordaba el Chucky siempre el máximo,
la vida sin freno vivía,
pero en un grato estuvo,
del anexo recién salido vendiendo monas de uva y guayaba,
el diablo en la esquina miraba,
si hay pera,
hay pera, pera, pera, así decía el Chucky,
siempre firme en su lema,
de las apuestas vive con tres chéves en la mano,
el gringo emigrante el sueño americano amano.
Santiago Cortés, el Chucky en la mira,
su vida un corrido,
una historia sin ira,
entre apuestas, amores y botellas,
el Chucky sigue,
su leyenda no se apaga.
Ah,
se Chucky en la mira,
su vida un corrido,
una historia sin ira,
entre apuestas,
amores y botellas,
el Chucky sigue,
su leyenda no se apaga.