Sí.

Hola, compañero.

Hoy tú y yo vamos juntos desde que no glimos.

Lo mismo, vamos, lloramos, reímos.

Y el respeto vivo,
todo me sabe mejor.

Somos como una fogata.

El que más nos gano,
lleva el lando allá.

Hay un terenguien de guerra, yo me pasa.

Y el respeto vivo,
todo me sabe mejor.

Se me murieron tus labores.

De esa noche que nos probamos,
nos dimos gusto y mal.

Nunca nos despegamos.

Y después de tanto tiempo,
mira dónde estamos.

Desde que nos juntos, ya mismo quedamos.

Porque llegaste para quedarte.

Y ahora sí, yo no voy a ir a una parte.

Y con la música que no quiero hablar,
de él y de mí.

Y que con mis manos amargo,
y de él y con los ojos claros.

Y el que nunca se acaba ahora,
no de mi, es lo que me da por ayer.

Vivo y yo vamos juntos desde que no glimos.

Lo mismo,
vamos, lloramos,
reímos.

Y es que contigo, mi amor,
todo me sabe mejor.

Lo que son tus hielos, los labores.