Era el primer toro de la tarde,
esta plaza era un enjambre,
que se volcaba en el ruedo.

De café, tabaco, esta morante,
grana y oro para dame,
de armillita de azul cielo.

De verde, pistache,
talabande,
para el julio un buen contraste,
al vestir de blanco y negro.

Y para completar el paseillo,
vivo silbete y verde olivo,
ya iniciaba el primer tercio.

Y de falda negra tu figura,
hembra de muy buena y lluvra,
tu dehesa está en el cielo,
labios para hacerte una faena,
chiquelinas altilleras,
al capote voy primero.

Y,
con revoleras naturales,
al tercero de la tarde,
le nombraron calesero.

Y clavaron un par de banderías,
mientras que a tus pantorrillas,
las quise tener por premio.

La gente gritó torero.

Y a los pies del dios de los ensinos,
yo le brindo mi destino,
porque aquí estás tú conmigo.

Labios para hacerte una faena,
chiquelinas altilleras,
al capote voy primero.

Y de falda negra tu figura,
hembra de muy buena y lluvra,
tu dehesa está en el cielo,
labios para hacerte una faena,
chiquelinas altilleras,
al capote voy primero.

Y de falda negra tu figura,
hembra de muy buena y lluvra,
tu dehesa está en el cielo,
labios para hacerte una faena,
chiquelinas altilleras,
al capote voy primero.

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